Arquitecto Luis Eduardo Bresciani por nueva cárcel: “Para cumplir con los estándares internacionales de calidad, requeriría una inversión altamente costosa”
Conversamos en ‘Qué Hay De Nuevo‘ con Luis Eduardo Bresciani, director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica, sobre el debate por la ubicación de la nueva cárcel de alta de seguridad, anunciada por el Gobierno, para enfrentar la crisis de seguridad.
Consultado por los emplazamientos y críticas de ciertos alcaldes respecto de la ubicación de la nueva cárcel, el arquitecto expresó que “es entendible y justificable la reacción que han tenido los alcaldes respecto a las alternativas de localización. Una cárcel no es algo que ninguna comunidad quiera cerca, dado los conflictos y las externalidades negativas que genera, y no hay manera de resolver ese problema, eso va a ocurrir en cualquier parte. Sin embargo, la información que existe es muy poca, en general, para realmente entender de qué estamos hablando”.
Sobre el argumento utilizado por la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, quien rechazó la idea de que el recinto penitenciario se construya en su comuna, dado que la tendencia internacional es instalarlos alejados de la ciudad, Bresciani manifestó que “es relativo. En general, casi todos los debates internacionales sobre este tipo de instalaciones tienen estándares, de metros cuadrado, espacios de rehabilitación, requieren mucho más espacio que resuelva los conflictos de hacinamiento que finalmente no resuelven el problema del conflicto interno”. En ese sentido, enfatizó en que “no es porque se busque localizarse en sectores rurales, sino porque el estándar de una buena cárcel, de alta seguridad, requiere una serie de instalaciones de seguridad, de rehabilitación, de control, que obligan, normalmente, a terrenos de mayor tamaño”.
Dicho lo anterior, aclaró que sí se podría hacer en el centro de la ciudad, pero a su juicio “para cumplir con los estándares internacionales de calidad, requeriría una inversión de alto estándar, altamente costosa, y yo tengo la impresión que lo más probable, dado lo que se ha escuchado, es que se termine construyendo con los estándares básicos que se ha tenido los últimos 20 años, eso implica que probablemente no vamos a tener un proyecto de calidad”.