Entrevistas

Defensa de ministra Vivanco acusa “lapidación pública” y llama a “abrir el naipe completo”

Conversamos en ‘Qué Hay De Nuevo con Juan Carlos Manríquez, abogado defensor de la ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, quien fue suspendida de todas sus funciones tras conocerse las polémicas conversaciones que mantuvo mediante WhatsApp con el abogado Luis Hermosilla, que sugieren ciertas gestiones del penalista en la nominación de Vivanco al máximo tribunal en 2018.
Consultado por la decisión de Vivanco de entregar de manera voluntaria su teléfono celular y computador personal a la Fiscalía de Los Lagos en el marco de las indagatorias del Caso Audio, el abogado defensor aclaró que si bien “en este tipo de materias suelen comunicarse como si ocurriera un allanamiento, pero no es tal, es un ingreso y entrega voluntaria. A fin de evitar cualquier otro tipo ya sea de especulaciones o dilaciones como nos interesa esto, nos pusimos a disposición y decir  ‘bueno ahí están los equipos’”. 
Asimismo, aseguró que solicitaron al Ministerio Público los chats que se le atribuyen a la ministra, ya que “se hace ultra indispensable y como base mínima de legitimidad de un debido proceso tener acceso nosotros también al mismo tiempo a la totalidad de esos antecedentes para hacer lo que se llama un control cruzado”.
Respecto de este caso, pese a que comparte el interés de la prensa, Manríquez hizo un llamado a “la prudencia, a la discreción, a no hacer juicios anticipados en la plaza pública sin darle a nadie la posibilidad de defenderse porque eso se llama una lapidación”.
Dicho lo anterior, insistió en que “no estoy poniendo en duda la labor de la prensa ni tampoco diciendo que se está trabajando con evidencia adulterada o falsificada en este caso. Lo que estoy diciendo es una cosa muy precisa. Estoy diciendo que para poner esas cuestiones en su contexto y poder explicarlas, porque hasta ahora la señora Vivanco no ha tenido la posibilidad de explicar eso que se le dice, y poder atener explicaciones, podrán ser atendidas o no”.
En este contexto, destacó que “lamentablemente, estos hechos han demostrado, y perdónenme lo que les voy a decir, las causas penales nos hacen convivir con lo más gris a veces, con lo más profundo de los problemas humanos, en términos generales (…) yo digo que hay que abrir esto como un naipe completo, sin cartas marcadas, jugarlas, analizarlas, pero con templanza”.
En esa línea, hizo hincapié en que “si uno cae en esta forma de juzgar al estilo de generar armageddones, y no se malentienda, dos o tres titulares de prensa por prestigioso que sea el medio, entonces los tribunales debieran ser derogados porque uno debiera ponerle simplemente la pena después de la última portada. Y así no funciona el sistema. Entonces, yo creo que por ahora esta lapidación pública, esta avalancha de prejuicios -que pueden ser confirmados o no- exigen todavía tiempo”.