Tercera toma de Lima: ¿Por qué se reactivaron las manifestaciones en Perú?
Durante la jornada del miércoles 19 de julio, se reactivaron las protestas en Perú. Se trata en específico de la tercera toma de Lima, una marcha que marca el retorno de una larga ola de movilizaciones sociales en contra del actual Gobierno de la Presidenta del país Dina Boluarte.
Estas manifestaciones podrían explicarse principalmente debido a que en Perú han gobernado seis presidentes solo desde 2016. En esta misma línea, el anterior Presidente de la República, Pedro Castillo, estuvo en el cargo hasta el 7 de diciembre de 2022, día en el cual intentó llevar a cabo un autogolpe de Estado e intentar disolver el Congreso. Tras este hecho, Dina Boluarte asumió el poder de Perú.
Sin embargo, según la Defensoría del Pueblo, desde que Boluarte asumió la presidencia se han reportado 49 civiles muertos en los enfrentamientos con la policía, al menos otros 11 muertos por el bloqueo de rutas, y también se ha reportado la muerte de algunos militares y policías en medio de los enfrentamientos.
Es por esto que se ha generado una amplia convocatoria a esta tercera toma de Lima, la cual fue realizada por gremios antigubernamentales. Entre sus principales demandas está la renuncia de la Presidenta Boluarte, el respeto al derecho legítimo a la protesta y las sanciones necesarias a los violadores de los Derechos Humanos. Entre otras peticiones está la liberación de presos políticos, el cierre del Congreso de la República y el establecimiento de una Asamblea Constituyente.
En este sentido, se tomaron distintas medidas por parte de las autoridades peruanas. Por un lado se declararon zonas intangibles en Lima para “proteger áreas históricas”, se suspendieron labores educativas presenciales en ciudades como Cusco y Arequipa, se prorrogó el estado de emergencia y se advirtió de la realización de controles de identidad. Por su parte, la Policía Nacional también llamó a fotografiar y grabar a quienes generen disturbios durante las manifestaciones.
En tanto la Presidenta Dina Boluarte llamó a que las protestas fueran pacíficas, a pesar de que dice desconocer las razones por las que se generan. De todas formas, la mandataria ha intentado deslegitimar las protestas y ha sostenido que el poder Ejecutivo no tiene competencias en las principales demandas de los manifestantes.
Finalmente la tercera toma de Lima, tuvo acciones colectivas de protesta en al menos 64 provincias de Perú, y dejó a 8 personas heridas y 6 detenidos.