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Ecuador: La crisis que se vive tras el horroroso asesinato de un candidato presidencial


El asesinato de Fernando Villavicencio ha sido uno de los hechos que más ha afectado a Ecuador, pero no ha sido el único.

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Durante la tarde del miércoles 9 de agosto el candidato presidencial de Ecuador Fernando Villavicencio fue asesinado a la salida de un mitin político en Quito. Esta grave situación se suma a la ola de violencia que ha vivido el país en el último tiempo, la que va desde motines en la cárcel hasta el asesinato de políticos.

El contexto de violencia en Ecuador

Tan solo en este año se han producido diversas situaciones graves y violentas. En febrero de este año dos candidatos a alcalde murieron en atentados y en julio el alcalde de la ciudad de Manta, Agustín Intriago, fue asesinado en un ataque de sicarios mientras visitaba una obra. Ese hecho sin lugar a dudas conmocionó a Ecuador.

Ese mismo mes el candidato a la Asamblea Nacional por la provincia de Esmeraldas, Rider Sánchez, fue asesinado por cuatro sujetos que supuestamente habrían querido robar su auto. También durante ese mes, se generó un enfrentamiento entre presos del Centro de Privación de Libertad Guayas N°1 en Guayaquil, el cual dejó 31 muertos. Y no solo eso, sino que en algunas ciudades se han producido atentados y ataques con bombas en el transporte público, en vehículos particulares y en tiendas comerciales.

El problema con esta violencia es que está ligada estrechamente con el narcotráfico. Según un reporte publicado en julio por la Policía Nacional del Ecuador, en muchas de las provincias donde se han generado estos hechos se encuentran los principales puertos, lugares que son utilizados por los narcotraficantes para sacar o ingresar la droga del país. El poco control por parte del Estado ha permitido que se formen y se establezcan varias organizaciones criminales, lo que no solo ha aumentado la cantidad de droga incautada, sino que también ha aumentado la cantidad de homicidios. Pero a pesar de los esfuerzos de las autoridades, esta situación no ha mejorado.

El asesinato del candidato a la presidencia

Fernando Villavicencio tenía 59 años y era periodista. Fue líder sindical y miembro de la Asamblea Nacional de Ecuador antes de presentarse como uno de los ocho candidatos presidenciales para las próximas elecciones del 20 de agosto. El candidato se definía públicamente como un político de centro e iba como candidato por el movimiento Construye. Anteriormente Villavicencio había destacado por sus publicaciones e investigaciones sobre la corrupción del país y su propuesta política estaba basada en la lucha contra las mafias políticas y el narcotráfico, “con la ley y con las armas”.

Pero durante una de las actividades de su campaña, el candidato fue asesinado con tres disparos en la cabeza durante la tarde del miércoles 9 de agosto. Este hecho también dejó a más de 40 personas heridas, y según la Fiscalía de Ecuador dejó a uno de los sospechosos muerto.

El asesinato de Villavicencio fue comunicado por la Clínica de la Mujer, lugar al que había sido trasladado luego del ataque, y fue atribuido a bandas de narcotraficantes. Y es que hace unos días el candidato ya había sido amenazado por la banda criminal “Los Choneros”, razón por la cual estaba siendo protegido por parte de la Policía Nacional. Pero a pesar de estas amenazas, algunos medios de comunicación compartieron un video donde supuestamente la banda de narcotraficantes de “Los Lobos” se atribuía el asesinato. Sin embargo, un supuesto portavoz de esta organización salió a desmentir esta información.

El asesinato de un candidato a la presidencia no había ocurrido en la historia reciente de Ecuador, por lo que debido a esta grave situación, el actual presidente Guillermo Lasso decretó estado de emergencia nacional por 60 días. Esta medida implica la suspensión de algunos derechos fundamentales como la libertad de reunión, y ha sido una de las herramientas recurrentes en el Gobierno de Lasso. Finalmente el mandatario sostuvo que las elecciones se realizarán de todas formas el 20 de agosto como estaba previsto, pero con un mayor despliegue militar.

Finalmente varios gobiernos y cancillerias de Lationamérica condenaron el asesinato de Villavivencio, como Chile, Argentina, Brasil, Colombia, México y Perú. Así mismo, el embajador de Estados Unidos y China en Ecuador también se refirieron al respecto, mientras que la Unión Europea instó a proteger al resto de candidatos para garantizar un proceso democrático.