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Despido por necesidades de la empresa: todo lo debes saber

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El despido por necesidades de la empresa es una de las causales establecidas en el Código del Trabajo en Chile para poner fin a una relación laboral. Sin embargo, su aplicación debe cumplir ciertos requisitos legales para evitar vulneraciones a los derechos del trabajador.

Si te enfrentas a esta situación, es importante conocer tus derechos y asegurarte de que se respeten. Por eso, aquí te contamos todo lo que debes saber sobre este tema.

¿Qué es el despido por necesidades de la empresa?

El despido por necesidades de la empresa se encuentra regulado en el artículo 161 del Código del Trabajo y permite que un empleador termine un contrato de trabajo cuando existan razones justificadas relacionadas con:

· Motivos económicos que afecten la demanda de productos o servicios que ofrece la empresa.

· Transformaciones tecnológicas que impliquen cambios estructurales en la empresa y hagan innecesaria la labor del trabajador.

· Cambio en las condiciones del mercado que alteren el entorno de la empresa y hagan inviable la continuidad del trabajador en su puesto.

Cabe destacar que la legislación laboral establece que no es posible despedir a un trabajador por la causal de “necesidades de la empresa” mientras este se encuentre con licencia médica, ya sea por enfermedad común, accidente laboral o enfermedad profesional.

Requisitos legales para la correcta aplicación del despido por necesidades de la empresa

Aviso previo

El empleador debe notificar por escrito al trabajador con 30 días de anticipación sobre su despido. Además, debe enviar una copia de la carta a la Inspección del Trabajo.

Si no lo hace, debe pagarle una indemnización que sea igual al último sueldo mensual recibido.

Especificar causal de despido

La carta de despido debe determinar la causal legal aplicada y las razones que justifican el término del contrato. Estas deben ser objetivas y verificables y no pueden basarse únicamente en la voluntad unilateral del empleador.

Pago de cotizaciones previsionales

Al despedir a un trabajador, el empleador debe informar el estado de las cotizaciones previsionales y asegurarse de que estén pagadas al día. Si no lo están, el despido podría considerarse nulo, y el trabajador tendría derecho a seguir recibiendo su sueldo hasta que se regularicen.

Indemnizaciones correspondientes

El trabajador tiene derecho a una indemnización por cada año de servicio con un tope de 11 años. Así mismo, si al momento del despido el trabajador no ha hecho uso de sus vacaciones anuales, el empleador debe pagarle junto con el finiquito, el monto correspondiente a los días de vacaciones pendientes.

¿Qué puedo hacer si considero mi despido injustificado?

Si el trabajador considera que el despido es injustificado, indebido o improcedente, tiene un plazo de 60 días hábiles desde la fecha del despido para presentar un reclamo administrativo ante la Inspección del Trabajo o interponer una demanda ante los Tribunales de Justicia.

Cuando el trabajador presenta un reclamo en la Inspección del Trabajo, se cita al empleador a una reunión de conciliación dirigida por un fiscalizador, con el objetivo de llegar a un acuerdo entre ambas partes. Si no se logra un entendimiento, el trabajador tendrá que llevar el caso a los Tribunales del Trabajo para seguir con su demanda.

¿Cómo puede ayudarte un abogado laboral en estos casos?

Un abogado laboral puede prestar asesoría en la presentación de un reclamo ante la Inspección del Trabajo o una demanda por despido improcedente, y ayudarte a:

· Revisar la legalidad del despido: para evaluar si se cumplieron todos los requisitos legales y detectar posibles irregularidades.

· Negociar con la empresa: con el fin de conseguir una mejor indemnización, ya sea a través de acuerdos extrajudiciales o durante el proceso judicial.

· Representarte en un juicio laboral: si el caso llega a los tribunales, el abogado defenderá tus derechos y buscará obtener la mejor compensación posible.

En caso de que el tribunal determine que el despido fue injustificado, el empleador podría ser obligado a pagar una indemnización por años de servicio incrementada en un 30% adicional.

Si te encuentras en esta situación, tienes dudas o necesitas asesoría legal, contactar a un bufete de abogados especializado en derecho laboral es una buena opción para proteger tus derechos.