A 25 años de la ‘Fuga del Siglo’: Así fue el escape de 4 frentistas de la cárcel de alta seguridad en Santiago
Un 30 de diciembre de 1996 cuatro frentistas se escaparon en helicóptero de la cárcel de alta seguridad de Santiago. Amarrados y colgados de una cuerda lograron burlar la seguridad de uno de los recintos más sólidos del país.
Tras la cinematográfica escapatoria los frentistas Mauricio Hernández Norambuena, Ricardo Palma Salamanca, Pablo Muñoz Hoffman y Patricio Ortiz Montenegro, se convirtieron en los presos más buscados de Chile.
El grupo era parte del Frente Patriótico Manuel Rodriguez y habían sido acusados, entre otros delitos, del asesinado del senador Jaime Guzmán en abril de 1991.
La operación también llamada “Vuelo de Justicia”, fue una de las escapatorias más impresionantes vividas en el país que logró en 58 segundos alejar a sus protagonistas de las rejas para siempre.
La fuga
Cerca de las 15:00 horas de ese 30 de diciembre, apareció un helicóptero sobre el cielo de la Cárcel de Alta Seguridad. Con fusil en mano, los pasajeros de la aeronave comenzaron a disparar a los gendarmes ubicados en las torres, los que se parapetaron sin poner resistencia alguna.
En paralelo, Maurio, Ricardo, Pablo y Patricio se encontraban en el patio de la prisión a cielo abierto, simulando una reunión. La señal era un balde amarillo invertido donde se posó una canasta que era su pasaje de salida.
Durante los segundos en que la canasta estuvo cerca del piso, los cuatro frentistas se acomodaron en ella. Ricardo y Pablo, lograron entrar. Mauricio y Patricio salieron colgando de este.
¿Qué pasó con los frentistas?
Tras la escapatoria, los prisioneros llegaron a una cancha de fútbol en la comuna de La Granja donde tomaron rumbos distintos camino al extranjero.
Mauricio Hernández Norambuena, fue condenado a una doble cadena perpetua por el asesinato de Jaime Guzmán. Más conocido como el ‘Comandante Ramiro’, tras la fuga llegó a establecerse en Cuba, para luego arribar a Colombia y finalmente llegar a Brasil donde fue condenado por el secuestro y posterior cautiverio del empresario Washington Olivetto.
Estuvo 17 años detenido en una cárcel de alta seguridad ubicada en Brasil, para luego ser extraditado a Chile en 2019.
Por su parte, Ricardo Palma Salamanca, quien fue considerado el autor material del asesinato, recibió asilo politico en Francia, al igual que Patricio Ortíz quien consiguió asilo político en Suiza el año 2005.
Finalmente, Pablo Muñoz Hoffman continúa viviendo en la clandestinidad.