Entrevista Infinita

A cinco años del 18-O, Jorge Selume reconoce que hubo “falta de diagnóstico” de la “élite gobernante”

En la antesala a los 5 años del 18-O, en conversación con ‘Ahora es Cuando’, el exdirector de la Secretaría de Comunicaciones del Gobierno de Chile (Secom) y autor del libro Tiempos MejoresJorge Selume, analizó la revuelta y la contingencia social y política actual de Chile. 
En primer lugar, Selume se refirió a las medidas adoptadas por el gobierno de Sebastián Piñera durante la revuelta. Al respecto, realizó una autocrítica y afirmó que “siempre existe la posibilidad de que las cosas hubiesen sido medianamente distintas”. De esta manera, reconoció que “hubieron aciertos y errores, pero creo que hay un común denominador que aplica al Ejecutivo y otras instituciones, que es la falta de diagnóstico”.
En la misma línea, el exdirector de la Secom explicó que “es verdad que existían antecedentes respecto a un potencial malestar que se estaba incubando, pero de ahí a preveer la magnitud y la violencia del estallido es algo que nadie tenía en el radar”, y agregó que “cada uno tenía su propio termómetro y eso hacía muy difícil poder consensuar cuáles eran las soluciones, incluso dentro de la misma coalición (…)  eso fue muy complejo, porque de alguna manera la elite gobernante se vio congelada e inmovilizada”. 
Selume también aseveró que está la idea “de que el 18 de octubre fue un estallido de un momento hacia otro”, no obstante, “la verdad es que desde que fue el alza de transporte (el 5 de octubre) comenzamos a vivir un in crescendo” que llevó al estallido.
Finalmente, Selume apuntó al rol de la clase política durante el estallido y en la actualidad, catalogándola como “un enchufe que no le hace al toma corriente”. De esta manera, concluyó que la política “ya no conduce y es un problema que tenemos hoy en la democracia occidental: la política parece ‘inútil’ a ojos de la ciudadanía”. Así advirtió que “esa complejidad la tuvimos ahí (en el estallido), y la vamos a seguir teniendo en la medida que no seamos capaces de modernizar la industria política”.