Cuzco: Los Destinos Más Icónicos de la Ciudad Inca

En una nueva edición de Viaje Infinito, emprendimos rumbo a Cuzco, la antigua capital del Imperio Inca y la puerta de entrada a las maravillas de los Andes. Esta ciudad, llena de historia y cultura, nos invita a viajar al pasado mientras nos ofrece una experiencia única con sus coloridas calles, su arquitectura colonial y, por supuesto, su cercanía a algunas de las maravillas más asombrosas del mundo. Si planeas tu visita a esta ciudad mística, no puedes dejar de recorrer estos tres lugares emblemáticos que capturan la esencia de Cuzco y sus alrededores.
1. Machu Picchu: La joya de la corona, Machu Picchu, es un imperdible para cualquier viajero que llegue a Cuzco. Esta antigua ciudadela inca, ubicada a más de 2.400 metros sobre el nivel del mar, sigue siendo un enigma para los arqueólogos y una maravilla para los turistas. Su impresionante arquitectura y las vistas espectaculares de las montañas circundantes lo convierten en un lugar mágico que te dejará sin aliento.
2. Sacsayhuamán: Ubicado a pocos minutos del centro histórico de Cuzco, Sacsayhuamán es una fortaleza inca con enormes muros de piedra que parecen desafiar la ley de la gravedad. Los bloques de piedra, algunos de los cuales pesan varias toneladas, fueron tallados con una precisión increíble, y aún hoy los expertos no pueden explicar completamente cómo se construyeron. Además, el sitio ofrece vistas panorámicas de la ciudad de Cuzco, lo que lo convierte en un excelente lugar para conocer la historia y disfrutar de un paisaje impresionante.
3. La Plaza de Armas: El corazón palpitante de Cuzco, la Plaza de Armas, es el lugar perfecto para comenzar a explorar la ciudad. Rodeada por majestuosos edificios coloniales y la Catedral de Cuzco, esta plaza ha sido testigo de siglos de historia y es un punto de encuentro para turistas y locales. Aquí podrás disfrutar de la arquitectura barroca, tomar un café en una de las terrazas y absorber la vibrante energía de esta ciudad ancestral.
Cuzco no solo es una ciudad para conocer, sino para sentir y vivir. Con su mezcla de historia, cultura y paisajes impresionantes, es un destino que siempre deja una huella en quienes lo visitan.